domingo, 24 de enero de 2021

24-01-2021

Este mes de a poco me he estado cambiando a la casa de mi papá, son 10 años aprox sin volver a mi antigua pieza. Puse mallas y me instalé con mi gata. Hoy fuimos a buscar mi escritorio, cuando habíamos salido del condominio recordé que no llevábamos el carrito del supermeado para ponerlo arriba, entonces mi papá me dice:

¿para qué lo quieres? Traigamos el escritorio juntos.

No me lo puedo, le dije, a lo que él respondió.

 Tienes 30 años y no tienes la fuerza para traerte tu escritorio, vamos sin el carro.

Fue una situación extraña, podría decir que, como soy mujer no me lo puedo, es muy grande, pesa mucho, no tengo la fuerza, pero… el género nunca fue una excusa para mi papá, y lo encuentro excelente, es que la verdad, tengo 30 años y no hago nada de ejercicio, estoy lánguida. Recordé cuando estábamos en el campo, tenía unos 13 años y al caer la tarde íbamos a buscar leña, mi papá jamás me ayudo con las ramas que elegía, que en ocasiones solían ser el triple de mi porte, me reclamaba por ser débil, pero nunca tomó mi rama y la llevó por mí, caminaba más lento mientras me decía, tienes que hacer esto más seguido, es importante tener fuerza, como no te puedes esa rama… Hoy fue similar “como no te puedes tu escritorio”, y al final terminé yendo a buscar el carrito, es que enserio, sabía que no tenía la fuerza traérmelo (jejeje), tengo que hacer ejercicio lo sé.

Recién leyendo mi blog encontré un escrito, del 30 de diciembre del 2010, hace 11 años, ahí tenía 20 años, hoy tengo 30. Esta era mi preocupación:

“A mis 20 años siento que no soy nada y me falta mucho para tener éxito, he pensado mucho como quiero trabajar, y siempre se me cruzan los consejos de mi papá, “hija sé independiente, ten tu propio SELLO, y las personas te van a buscar” independencia es lo que he querido desde pequeña, mi propio mundo en donde pueda encajar y disfrutar este torcido planeta”.

Hoy… Ya soy independiente, tengo mi agencia y mis clientes.

Estoy agradecida, luché y alcancé las metas que tenía cuando era adolecente.

domingo, 3 de enero de 2021

Histórico 2020

 El año que pasó fue único, no sé muy bien como describirlo, fue... extravagante. Para la mayoría grotesco para mí excéntrico, descubrí que no todo lo nuevo puede ser interesante, a veces simplemente es aburrido. 

El verano fue bueno, vacacioné un fin de semana en Algarrobo, tuve varias reuniones algo que me ayudó bastante dentro del año, tomé un cliente freelance y ¡Paf! Pandemia. A mitad de marzo ya comenzábamos con la cuarentena voluntaria por el Corona Virus. Lo tomé bien, soy tranquila, estoy acostumbrada a estar sola, y estar encerrada unos meses no me perturbaba, estuve viviendo 3 años en Punta Arenas y la sensación de encierro era similar, pasó un mes, pasaron 3, pasó un semestre, llegó fin de año y aún sigo encerrada, un estilo de aventura nuevo y desconocido hasta ahora, cambio mi horario de sueño, sentí más ansiedad, escuchar a mi hermano pasó de ser tolerable a irritante, comencé a tomar vitamina D y un vaso de whisky (sin bebida) al día, tuve consultas con una psicóloga y viví la magia de tomar antidepresivos por unos meses (maravilloso). Puede sonar mal... pero la verdad no fue malo. 

- Singlart se mantuvo estable es plena crisis sanitaria mundial, comencé a trabajar con mi amigo Claudio y ahora somos socios, hicimos varios trabajos interesantes y hemos tenido una excelente relación con nuestros clientes. Gané el fondo Ruta Digital de Sercotec y con el dinero pude actualizar el sitio web y certificarme en Google Ads. 

Llegamos a las factura 150 y lo celebramos: 



- Estuvimos gran parte del año con asesorías del CDN que nos ayudaron harto. 

- Me mantuve con dos clientes estables gran parte del año. Algo que venía buscando hace tiempo. 

- Pinté harto, cuadros y latas, con mi papá queremos vender lipthos, cactus y suculentas, así que hemos estado todo el año preparándonos para eso. 

 


- Por fin comencé mi tratamiento de ortodoncia para ponerme frenillos, lo pude iniciar con el 10% de mi AFP. 

- Me compré cremas, maquillaje y aprendí a maquillarme mejor | Me compré hartos cursos online en Crehana y Domestika | Compré muchos deliverys | Un celular | Una xbox 360 | Parlantes y Audífonos. 

- Mi hermano terminó la enseñanza media con ayuda mía y un peruano que nos ayudó en matemáticas. 

- Comencé a cantar y ha sido bien entretenido, me hice un canal llamado Cantomo, donde tomo y canto karaokes. 


- Hemos conversado para retomar Ato e intentar este 2021 vender alguna polera. 

Y eso. Fue un año tranquilo y hay que esperar a que pasé la pandemia. 

Si recuerdo algo más lo agregaré.